Tipos de faros del coche: las diferencias de un vistazo
Luz LED del coche como (futuro) estándar
Durante mucho tiempo, la luz de xenón fue el estándar para los coches de la clase de lujo o de la clase media alta. Sin embargo, la luz LED también se utiliza ya ampliamente en los coches nuevos. Al principio, las luces LED solo estaban presentes en las luces traseras y las luces de freno, pero ahora también se instalan, cada vez con más frecuencia, como luces de cruce o de carretera. La tendencia apunta claramente hacia la luz LED: es probable que sustituya por completo a las luces de xenón y halógenas en un futuro no muy lejano.
En comparación con las luces de xenón y las luces halógenas de los coches, las luces LED tienen varias ventajas:
- Son más brillantes que las lámparas halógenas.
- Ahorran energía.
- Son duraderas.
Una matriz de luz LED está formada por varios LED que pueden controlarse individualmente. Esto significa que pueden encenderse y apagarse individualmente y atenuarse en varias gradaciones. Este control de precisión permite ajustar de forma óptima la intensidad luminosa y la dirección del cono de luz a las respectivas condiciones de tráfico, meteorológicas y de visibilidad. Se reduce así el deslumbramiento para el conductor de un vehículo que circula en sentido contrario o del vehículo que le precede, ya que los LED simplemente se apagan o se atenúan automáticamente cuando se detecta el tráfico en sentido contrario o el vehículo que le precede. La la potencia lumínica se regula siempre de forma que la iluminación de la calzada no se ve afectada, sino que solo se reduce el efecto de deslumbramiento para los demás usuarios de la vía.
Por regla general, las luces LED duran 15 años, lo que supone una vida útil muy larga en comparación con los faros de xenón o halógenos. Sin embargo, la sustitución de las luces LED también va acompañada de la sustitución del faro completo, ya que los diodos defectuosos no pueden cambiarse por separado. Dependiendo del faro, puede costar entre 600 y 5.000 euros.
Tenga en cuenta que los faros delanteros y traseros de LED dejan de cumplir los criterios de homologación si tienen averiado más de un tercio de los LED. En este caso, el faro afectado debe ser sustituido lo antes posible.
Alta intensidad luminosa con luz de xenón
Los faros de xenón disponen de una lámpara especial de descarga de gas xenón en la luz de cruce o en la de carretera. La lámpara se enciende bajo alta tensión (20.000 V), creando un arco eléctrico. En comparación con las lámparas halógenas, los faros de xenón son, por tanto, mucho más luminosos. Le ofrecemos una visión general de las ventajas de la luz de xenón en el coche:
- Ofrece más del doble de intensidad luminosa que una lámpara halógena H7
- Requiere un tercio menos de energía eléctrica que una lámpara H7
- El color de luz corresponde a la luz del día (el conductor tarda más en cansarse)
- Baja tasa de fallos gracias a la alta resistencia a las vibraciones y a los golpes
- Mayor duración que las lámparas halógenas
Los sistemas de xenón disponen de regulación automática del alcance de las luces. Se utilizan sensores para controlar el peso del vehículo y su velocidad, y la posición de los faros se regula continuamente. Esto garantiza una iluminación óptima de la calzada, independientemente del estado de carga y de la dinámica actual del vehículo.
Luz halógena en el coche
A diferencia de la luz de xenón o LED, la halógena es una tecnología bastante antigua. En pocas palabras, es una evolución de la bombilla convencional. A diferencia de esta, una bombilla halógena está llena de un gas halógeno (normalmente yodo). Un filamento de tungsteno se calienta mediante una corriente eléctrica, lo que provoca la emisión de luz.
Las ventajas de las lámparas halógenas sobre las lámparas incandescentes convencionales son las siguientes:
- Mayor temperatura de funcionamiento y, por tanto, una luz más brillante y blanca
- El gas halógeno prolonga la vida de la lámpara y aumenta la eficacia luminosa
- Construcción menos compleja del sistema de iluminación: la luz de cruce se puede cambiar fácilmente (también lo pueden hacer los no expertos)
- Rentable en comparación con la luz de xenón y LED
Mientras que los faros de xenón o LED tienen una vida útil muy larga, las lámparas halógenas solo suelen durar entre 250 y 400 horas. Por ello, es necesario sustituirlas con más frecuencia que los otros tipos de luz. Sin embargo, como las lámparas incandescentes son muy baratas y no suele ser necesaria una visita al taller para cambiarlas, la sustitución sigue siendo más barata que el cambio de una luz de xenón o LED, incluso a muy largo plazo.